El problema es que diariamente tenemos que luchar contra las mentiras del sistema opresor, de falsificación histórica mundial.
Nelson Mandela fue un terrorista, ligado al movimiento terrorista del Comunismo Internacional (Esclavitud de la Humanidad), y Martin Luther King también fue un agente del comunismo internacional asesino de mujeres y niños, ninguno de los dos fue un héroe nacional.
Ahora bien, todos sabemos que López Obrador es inferior a esos dos políticos, en el sentido de que su obra criminal en México, no es celebrada por el mundo.
Nelson Mandela además fue un hombre sucio, un adultero y fornicario como Claudia Sheinbaum, tuvo muchos amantes, una de ellas Winnie Mandela quien asesinaba personas quemandolas vivas, poniendoles llantas de automovil al cuello.
La razón por la que Mandela llega a ser presidente de Sudáfrica, es por la corrupción de políticos comunistas, como Joe Slovo, que era blanco, pero era judío, su nombre real era Yossel Mashel Slovo; nació el 23 mayo 1926, murió el 6 enero 1995.
Por éstos criminales agentes comunistas, es que después se construye la mentira de Nelson Mandela como un líder social, cuando reitero fue un terrorista, y fue envidado con justicia a prisión.
El Premio Nobel de la Paz ha sido entregado a criminales como Kissinger, Obama, Shimón Peres, entre otros, el premio nobel de la paz, está sucio de sangre y crimenes inmundos. Si se lo dierón a Mandela es porque fue un criminal al servicio del comunismo.
Nuestros comunicadores, aún con todas las fuentes de información de que disponen, no logran desmentir las mentiras construídas por el sistema para esclavizar la mente de los más jóvenes.
En un mundo justo el nombre de Nelson Mandela debe ser desechado a la basura, y señalado como el criminal torturador de Sudáfrica que fue, debe ser denostado y criminalizado, objeto de vergüenza y condena, no sólo eso, tengo conocimiento de que autorizó experimentos criminales que ordenó contra el pueblo negro de Sudáfrica, pero la censura y amenazas me impiden decirlo, aquí, porque el poder de las farmacéuticas es mucho.
No me asombra que Sheinbaum quisierá que los crímenes de López Obrador fueran celebrados como los de Mandela, pero eso por lo visto no ocurrirá jamás.
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