Mal calificada por los críticos, la película de Superman (1983) deja mucho que desear en cuanto a la narrativa, lo que lleva a pensar que quizá tenía otros propósitos plasmar las ambiciones o posibilidades de las computadoras en 1983 como hacer colapsar sistemas de seguridad mundial.
En 2024, más que nunca se exhibe como el mundo depende de los sistemas informáticos relacionados con transporte, seguridad y finanzas.
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