Advertencias sobre el "maestro" Erik SoHam

 

Es mi deber como hombre de Dios alertar sobre los peligros que propaga un influyente agente de la masonería y la secta rosacruz en México llamado el maestro Erik SoHam, éste brujo ganó notoriedad en la radio en la década de los 90's en programas de radio sobre temas sobrenaturales de la mano del influyente locutor Juan Ramón Sáenz (1962-2011), muchas personas con sus problemas personales se ponen en contacto con él sin saber que los conduce por sendas de oscuridad a abrir puertas cada vez peores.

1. Reencarnación: Solo se vive una vez, la creencia en la reencarnación es una herejía que propaga SoHam que hace pensar a muchas personas inocentes que su mala situación actual se deben a "maldades que cometieron en vidas pasadas que no recuerdan" y ésto es completamente falso, y lleva a las personas a solicitar la asistencia en engaño de brujos que los libren de sus "vidas pasadas", la gente solo vive una vez, como solo una vez se es niño, adolescente y adulto, no hay retorno nos dice la palabra de Dios.

2. El "maestro SoHam" aconseja a las personas adentrarse en brujería en la Sinagoga de Satanás y en el ocultismo demoniaco anticristiano que es la Masonería fundada en el año 43 d.C. secretamente por el edomita Herodes Agripa, la ha definido como "una muy buena escuela espiritual". El rosacrucismo por su parte es una secta diabólica que ha promovido el protestantismo, la herejía y fornicación de Martin Lutero, la homosexualidad y la destrucción de la familia a través del adulterio, ellos tuvieron influencia en la guerra anticatólica del rey de Inglaterra, Enrique VIII por su obsesión por su amante Ana Bolena.

3. Erik SoHam promueve el panteísmo y el culto a la Madre Tierra, promueve una serie de creencias sincréticas con las que pretende hacer viable violar las leyes del universo establecidas por Dios, a esto se le conoce como magia o brujería, que es lo contrario a los milagros y en todo acto de magia o brujería interviene el demonio.

Las personas que necesiten ayuda no deberían acudir a él.